El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) finalizó la investigación sobre el caso de Keibril Amira García Amador, de 9 meses en el momento de su desaparición.
Las conclusiones a las que llegó el OIJ, es que la bebé fue asesinada por su padre, un sujeto de apellido Casasola y que actualmente, descuenta prisión.
Según el OIJ, estas conclusiones se dieron tras tas corroborar evidencias del caso, encontradas por los agentes, y testimonios de personas claves.
Agentes del OIJ indican que, a pesar de la búsqueda, el cuerpo de la menor no se ha localizado y parece apuntar a que no se logrará recuperarlo.
También, el Organismo indica que Casasola arrebató a la pequeña de los brazos de su propia madre, para minutos después, asesinar a Keibril.
Algunos apuntes del OIJ indican que el sujeto de apellido Casasola llevó a Keibril en un vehículo sin asientos traseros, llevando a la bebé en esa parte del carro, donde aceleraba y frenaba, para así golpear a la menor y provocarle lesiones y heridas, lo que habría desencadenado su muerte.
El caso quedará en manos de la Fiscalía para su respectivo proceso, ya que el OIJ asegura que tienen pruebas para que Casasola enfrente un proceso penal.
Investigación se cierra casi un año después
El 9 de abril del 2023, justo en el día de Domingo de Resurrección, se reportó a las autoridades la desaparición de Keibril García Amador en Cervantes de Cartago.
Ese día, se reportó que Keibril fue arrebatada de los brazos de su madre, una jovencita que actualmente tiene 14 años de edad.
Habitantes del pueblo de Cervantes realizaron vigilias, búsquedas y hasta ayudaban a las autoridades para tratar de encontrar a la pequeña entre plantaciones de caña y lotes baldíos.
El OIJ continuó con la investigación y determinó que un sujeto de apellido Casasola, quien era pareja de la abuela de Keibril, era el principal sospechoso.
Según versiones que manejan las autoridades, el sujeto de apellido Casasola habría violado a la menor, que en ese momento tenía solo 11 años de edad, dejándola embarazada de Keibril.
Para confirmar esto, se realizó una prueba de ADN a Casasola, comparándola con sangre encontrado en restos de unas prendas de vestir encontradas en una de las búsquedas de Keibril.
Los resultados confirmaron que Casasola era el padre de Keibril, por lo que se acusó también de violación y sustracción de una menor.