Cuando los bomberos llegaron a liberarla ya no tenía signos vitales.
El hecho se dio la tarde de este jueves en San Pablo de Heredia.
Los arqueólogos descubrieron una villa con su propio baño ritual judío luego de excavar capas sucesivas de construcción y escombros que se habían acumulado durante dos milenios.
A su avanzada edad, a Frodo le costaba subir y bajar escaleras, pero no renunciaba a la rutina de calentarse al sol en el patio.
Los ingenieros estaban intentando reparar el elevador cuando encontraron un esqueleto masculino.
La Policía local logró establecer que los restos pertenecían a un hombre, pero todavía no ha aportado más detalles sobre su identidad, mientras sigue pendiente un análisis de ADN.