Un hombre intentó robar unas cervezas de la máquina de un negocio, sin esperar que su acción no sólo fracasaría, sino que sería castigada por el electrodoméstico.
El ladrón, quien llegó junto a otros secuaces a robar a un local comercial, tapó su rostro para no ser identificado, sin pensar que eso también le ahorraría un montón de burlas.
El bochornoso momento quedó registrado por las cámaras de seguridad del establecimiento, en cuyos registros se logra ver que el hombre logró salir con la ayuda de sus compañeros de fechoría.
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