Portando rótulos y globos, un grupo de extrabajadores de la fundación “Manos abiertas”, protestó por lo que consideran un riesgo de perder sus beneficios laborales tras el congelamiento de las cuentas de la mencionada institución. Ante esto, los exempleados solicitaron una reunión en Casa Presidencial para exponer su caso y el riesgo que aseguran que corren los menores de edad que tenían a cargo.