Las autoridades estadounidenses dejarán de buscar este jueves a los náufragos desaparecidos el sábado en costas de Florida, si no obtienen nueva información sobre su paradero, informó la Guardia Costera tras anunciar el hallazgo de cinco víctimas del siniestro.
“Si hoy no recibimos información adicional que pueda afinar nuestra búsqueda o dirigirnos hacia otros supervivientes, al atardecer de esta noche suspenderemos la búsqueda activa”, declaró el jueves la capitana Jo Ann Burdian, comandante de la Guardia Costera en el sector de Miami, durante una rueda de prensa.
El martes, un marino mercante había alertado a las autoridades tras rescatar a un hombre aferrado a una embarcación volcada a unos 70 kilómetros al este de la ensenada de Fort Pierce, en el Atlántico.
El náufrago contó que el sábado había salido de las islas Bimini, en las Bahamas, con otras 39 personas, y que un temporal había volcado su barco. Las autoridades sospechan que se trata de un caso de “tráfico humano”.
La Guardia Costera “encontró cuatro cadáveres en las últimas 24 horas” cerca del lugar donde halló el barco, que se suman a la víctima hallada el miércoles, precisó la capitana Burdian ante la prensa.
“Desgraciadamente, hemos llegado al momento más difícil en cualquier caso de búsqueda y rescate, y es el punto en el que decidimos cuándo dejar de buscar activamente”, lamentó la oficial.
La víspera, ya había dado pocas esperanzas respecto a la posibilidad de hallar supervivientes, dadas las duras condiciones del mar, sobre todo, para personas que no tenían salvavidas, comida ni agua potable.
Los traficantes de personas usan las Bahamas, un archipiélago cerca de la costa de Florida, como punto de partida para transportar personas, muchas de ellas procedentes de otros países del Caribe, como Haití, a Estados Unidos.