Abrazado y ser abrazado puede generar la disminución del cortisol, conocido como la hormona del estrés, uno de los detonantes de la inflamación de las células. Y es que según refiere el doctor Marco Vinicio Boza, especialista en medicina interna, la muestra de cariño puede promover la activación de la oxitocina, la hormona de la felicidad, la misma que regula la salud de todos nuestros órganos.