El macabro plan del dueño de un restaurante vegetariano quedó en evidencia cuando los clientes de su local comenzaron a reclamar porque en sus platos vegetales evidenciaron la presencia de trozos de carne.
Los comensales de la cocinería denunciaron a las autoridades de Bangkok, en Tailandia, que en sus platos de fideos vegetarianos había carne picada. La policía local acudió al restaurante y durante la inspección descubrieron sangre en las paredes de la cocina y trozos de carne que no parecían de origen animal.
Finalmente, un análisis de la carne confirmó que no se trataba de carne de res ni de cerdo, sino de carne humana. Durante el registro también se halló el cadáver en descomposición de un hombre de 61 años metido en un tanque séptico.
Se trataba de un cliente frecuente, Prasit Inpathom, quien fue visto por última vez tomando unas copas en el restaurante el 21 de octubre. Su hermano ya había informado a las autoridades de la desaparición el pasado 23 de octubre.
Al parecer Prasit estuvo involucrado en un altercado verbal con el dueño del restaurante. La pelea se intensificó y el hombre sufrió lesiones letales. Fue golpeado en la cabeza con un objeto punzante y tenía seis puñaladas en el estómago y en una pierna, recoge Daily Mail sobre información aparecida en medios locales.
La policía confirmó que la intención del propietario era deshacerse del cuerpo de Prasil moliéndolo y sirviéndolo por partes a los clientes del local vegetariano.
Cuando los oficiales llegaron al local, el presunto asesino se había fugado y ahora es intensamente buscado por la policía. Se desconoce si algún cliente consumió la carne humana.
Fotos: Shutterstock.
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