Personas inescrupulosas se aprovechan de la vulnerabilidad de las familias que desean ser beneficiarios de un bono de vivienda y terminan siendo engañados y estafados en el proceso.
Las personas deben saber que no hay que pagar dinero por terrenos que son propiedad del IMAS, pues precisamente por ser bienes del estado, escapan del ámbito de particulares, y por lo tanto, no se pueden vender o alquilar.