La actividad en el Volcán Poás vuelve a ser motivo de alerta en las localidades aledañas al macizo. La emanación de gases y ceniza se mantienen en las últimas 24 horas, principalmente sobre el Valle Central. El fuerte olor azufre se percibe cada vez más intenso, sin embargo no hay ningún pronunciamiento que remita peligro, solo vigilancia permanente por parte del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (OVSICORI).