Para esta modalidad, criminales no requieren llamar a víctimas para acceder a sus datos.
Desde el 2017, hubo un aumento del 23% en la cantidad de personas con una cuenta activa.
En un comunicado, el banco dijo que había sufrido "una falla técnica […] que afectó a un número limitado de cuentas", pero que "el problema se ha resuelto".