Redacción
Repretel.com
Alexandra Ruddy, una madre británica de 41 años de la isla de Jersey, salvó la vida de su hijo de 8 años al detectar en su brazo una marca roja y llevarlo inmediatamente al médico, que le diagnosticó sepsis.
Una semana antes, Alexandra y su hijo Ewan visitaron un zoo donde el chico se cayó, dañándose el brazo. Ya en casa, la madre usó un desinfectante para curarle la herida. Aunque el rasguño no parecía infectado, días después la mujer vio que en las partes dañadas del brazo habían aparecido unas marcas rojas a lo largo de la vena.
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Los médicos no tardaron en diagnosticarle al niño sepsis, o sea, septicemia, una enfermedad muy grave que cada año cuesta la vida a 15.000 en Reino Unido, según Mirror. Gracias a la rápida reacción de la madre, el hijo se recuperó satisfactoriamente tras someterse a un ciclo de antibióticos.
"La sepsis es una infección sanguínea. No se la puede ignorar y esperar hasta el lunes para inscribirse en la consulta del médico", destacó la mujer en su entrada en Facebook.
Aunque, en un primer momento, Ruddy no se sintió cómoda con la idea de compartir su historia por Internet, finalmente cedió al consejo de sus amigos y explicó la naturaleza del incidente para ayudar así a otras personas a detectar rápido este tipo de infección.
"Es un ejemplo de cómo las redes sociales pueden servir de buena fe", comentó Ruddy. De hecho, los usuarios de Facebook agradecieron su entrada y la compartieron para difundir la información.
