El ex futbolista internacional Dani Alves atraviesa momentos complicados en la cárcel tras las revelaciones hechas por un ex compañero de celda, según se ha dado a conocer a través del programa Fiesta, conducido por Emma García en Telecinco, España. De acuerdo con estas declaraciones, Alves habría sido ubicado dentro de un protocolo anti suicidio en la cárcel Brians 2 de Barcelona, luego de su juicio.
“Se han tomado medidas extremas. A raíz del juicio le ha pegado el bajón. Como deprimido, cabizbajo. Los educadores y funcionarios como arropándolo. Por miedo de que se cortará o se intentara hacer alguna locura o historias de esas. Estuvo con ese protocolo al día siguiente del juicio”, comunicó un preso acerca de la situación actual del brasileño.
El protocolo mencionado se concentra en la prevención, detección e intervención del riesgo suicida. Incluye evaluaciones para determinar el estado de los internos, medidas de seguridad como vigilancia continua y restricciones de movilidad, junto con programas de apoyo como terapias y actividades de ocio, orientados a evitar posibles suicidios.
Adicionalmente, se difundió que el ex Juventus, Barcelona y PSG (Entre otros) tenía planes de fuga a Brasil. Un ex compañero de prisión, también conocido como el ex guardaespaldas de Ronaldinho, identificado como Coutinho, habría informado a Silva Álamo (periodista del programa Fiesta) sobre las intenciones del futbolista de regresar a Brasil en caso de obtener libertad provisional.
“Los elementos del riesgo de fuga siguen existiendo. Lo de la ahogada situación económica es un poco llamativo. El patrimonio de fútbol de Alves es elevadísimo, es uno de los mejores jugadores de la historia. Sigue teniendo capacidad económica o amigos que la tienen. Insistimos en que Brasil no tiene convenio de extradición. Ahora que ve tan cerca la posible condena el riesgo de fuga, para nosotros es muchísimo más”, explicó la Fiscalía sobre esta situación.
Cabe destacar que entre el 5 y el 7 de febrero se llevó a cabo el juicio a Dani Alves, quien enfrenta acusaciones de agresión sexual a una joven en la discoteca Sutton de Barcelona. La Fiscalía pide para Alves una condena de 9 años de cárcel, mientras que la parte denunciante solicita 12 años. Tras la declaración de una treintena de testigos, tanto la Fiscalía como la acusación particular se opusieron a su liberación, quedando en espera de la sentencia final.
En dicho juicio, el futbolista negó completamente los hechos de los que se lo acusa y dio su versión de lo que ocurrió: “Yo le dije de ir primero al baño y que ella entrará después. Fui me quedé un rato esperando, creí que no iba a venir. Ya me iba cuando vi que estaba entrando. Cuando entramos al baño, ella empezó a desabrocharme los pantalones, yo la ayudé. Ella se puso encima mío y empezó a hacerme una felación (…) Yo no soy un hombre violento, para nada le agarré del pelo”.
La víctima, protegida de los periodistas acreditados en el juicio, también declaró durante algo más de una hora sin señal de vídeo y detrás de un biombo. Pero Alves sí ha podido escuchar cómo ratificaba todos los detalles que reflejó en su denuncia ante los Mossos d’Esquadra, aunque en un primer momento pensó que nadie la iba a “creer”.
Entre las declaraciones que se tomaron durante los tres días de interrogatorios también están las de su ex pareja Joana Sanz, quien aseguró que esa noche volvió a casa “muy borracho” y “oliendo a alcohol”. La modelo ha relatado que la madrugada del 31 de diciembre de 2022 el futbolista entró a la habitación de su casa en la ciudad condal, “se chocó” con un armario, una mesita y “se desplomó en la cama”.