Un milagro a vísperas del Día de Acción de Gracias. Así puede describirse lo que sucedió a pocos kilómetros de la ciudad de Milwaukee, en el norte de los Estados Unidos.
Aquí, decenas de perros se salvaron de una muerte segura cuando el avión en el que viajaban se estrelló en el campo del golf Western Lakes en Pewaukee, ubicado a 40 minutos de la principal ciudad del estado de Wisconsin.
El mal tiempo y las intensas nevadas en esta parte del país norteamericano dañaron la aeronave, situación que la obligó a hacer un aterrizaje de emergencia en este lugar.
Según informó la cadena local WTMJ-TV Milwaukee, los animales eran trasladados desde la ciudad de Nueva Orleans, Luisiana, hasta varios refugios localizados en el estado de Wisconsin al momento en que se registró el accidente.
Eran un total de 53 los canes que iban a bordo de la aeronave cuando ocurrió el incidente.
Asimismo, los perros eran acompañados por una tripulación de tres personas, que también lograron sobrevivir al impacto.
“Creo que todos no estábamos seguros de a dónde íbamos a llegar, pero estamos muy agradecidos de que todos estén a salvo”, declaró Maggie Tate-Techtmann, directora de Desarrollo Organizacional en Human Animal Welfare Society – Waukesha County.
Un final feliz
Los informes de la Human Animal Welfare Society señalaron que ninguno de los perros sufrió alguna lesión de gravedad y vienen siendo asistidos por veterinarios locales.
Por su parte, la tripulación solo se vio afectada por el susto y por algunos rasguños, pero fueron supervisados posteriormente por un equipo médico.
Desde la Human Animal Welfare Society se indicó que, si bien se espera que se continúe con el cronograma de adopción previamente establecido antes del accidente, la situación ha complicado las cosas e hicieron un llamado a la población a que colabore con fondos para cubrir los gastos médicos y suministros para los animales heridos.
Autoridades iniciaron investigación de accidente
En cuanto al avión, este quedó gravemente dañado por las circunstancias dadas al momento del aterrizaje, ya que chocó con gran cantidad de arbustos y árboles, lo que provocó enormes daños en el área de almacenamiento de combustible y originó que se desprendiesen sus alas.
Los detalles son analizados por la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte y la Administración Federal de Aviación.
“Este fue un aterrizaje relativamente catastrófico donde atravesaron árboles.
El piloto y su copiloto hicieron un trabajo increíble al poner este avión en tierra”, indicó Matthew Haerter, del departamento de bomberos de Lake Country.