La casa de moda francesa Chanel llevó el glamour de vuelta a Cuba el martes con un desfile de pasarela en uno de los principales paseos de La Habana, donde se dieron cita los trajes brillantes, vestidos de cóctel y modelos con sombreros fumando puros.
Chanel es la primera gran casa de moda que envía modelos para desfilar en Cuba, en otra muestra del acercamiento de la isla caribeña con Occidente. El exclusivo show también recordó las desigualdades en el país de gobierno comunista.
Celebridades, incluyendo a la actriz Tilda Swinton y la supermodelo Gisele Bündchen, viajaron a la isla caribeña para el espectáculo que evocó la elegancia de la Cuba prerrevolucionaria, al llegar al lugar en convertibles antiguos. El contingente cubano de modelos incluyó al nieto del ex presidente Fidel Castro, Tony, un aspirante a modelo, lo que levantó algunas cejas, dados los ataques de su abuelo contra el capitalismo.