Tener más espacio para estacionar en zonas legales, ante la menor presencia de vehículos, producto de la restricción sanitaria, no ha sido obstáculo para que miles de conductores decidieran estacionar en zona prohibida. De ellos, 16.092 fueron sorprendidos y multados por la Policía de Tránsito.
Obstaculizar la salida de una cochera, estacionar en una acera, parquear a menos de cinco metros de un hidrante, una rampa para personas con discapacidad o de una esquina son algunas de las conductas detectadas en estos 10 meses.
A lo anterior se suma parquear en ciclovías, en zona con franja amarilla o con señalamiento de prohibición, estacionar en una curva o sobre paso peatonal, por dar otros ejemplos.
Este tipo de violación implica una sanción de ¢54.636,04, según detalló el Sub-director de la Policía de Tránsito, Alberto Barquero y si el conductor no está en el sitio, se le pueden retirar las placas o, incluso, el vehículo.
“Cada vez, hay más centros comerciales con sus facilidades de parqueo, muchas construcciones antiguas han sido demolidas en las principales ciudades y han sido convertidas en parqueos públicos, hay estacionamientos municipales con boleta, pero algunas personas no quieren gastar un poquito en esos servicios, o no quieren caminar, quieren salir a la ciudad a hacer los mandados y estacionar cada 50 metros frente al comercio de su interés y debemos entender que las carreteras son, principalmente, para circulación. A algunos simplemente es el gusto por trasgredir, Por ahí le achacan al Estado los congestionamientos, pero en realidad, mucha falta de espacio para circular obedece justamente al estacionamiento ilegal”, acotó Barquero.
La Policía de Tránsito recuerda e insiste en que el concepto de “el momentito” no existe. Da lo mismo que un vehículo tenga media hora mal parqueado o 1 minuto. Se debe acatar la Ley.