No es extraño que en una situación como la actual, en medio de una pandemia y de una crisis sanitaria sin precedentes, las dudas en torno a un embarazo se multipliquen de forma exponencial en las futuras madres.
En principio, y según datos ofrecidos el pasado septiembre por la Organización Mundial de la Salud, las alteraciones de las embarazadas afectadas por el Covid-19 no se diferencian de las del resto de la población. “El porcentaje de afecciones graves es de un 8%, y de situaciones críticas, de un 1% de los casos. Más de la mitad de estas mujeres estaban asintomáticas en el momento del parto”, explica a El Confidencial el doctor Rodrigo Orozco, especialista del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Quirónsalud Málaga.
Con el paso de los meses ha aparecido más información para las embarazadas: “Se han observado alteraciones en la coagulación de la sangre en pacientes infectados: a partir de ahí, y teniendo en cuenta que el embarazo puede influir en que la sangre se coagule con más facilidad de lo normal, sí podemos pensar que estar contagiada puede incrementar el riesgo tromboembólico de la paciente”, dice el especialista.
Pero el doctor Orozco enfatiza que, “no hay evidencias de que, durante los meses de gestación, el virus pueda provocar un alto riesgo de aborto o de parto prematuro espontáneos”.
Hasta el momento, tampoco se han encontrado evidencias que una mujer embarazada pueda contagiar al bebé, ni durante ni tras el parto, así como tampoco a través de la lactancia. No existe, por tanto, transmisión vertical (de madre a hijo), pero sí puede haber transmisión horizontal, es decir, de otra persona al bebé. “Este contagio suele darse por contacto con un familiar próximo que está infectado. Esa es la razón de que, actualmente, sea necesario restringir las visitas, tanto en el hospital como en el propio domicilio de la nueva familia”, advierte Orozco.
En cuanto a las medidas de protección frente al contagio que deben adoptar las embarazadas, son muy similares a las que se recomiendan a la población en general. No obstante, sí hay algunas indicaciones específicas:
1.- Deben vacunarse frente a la gripe para evitar el solapamiento de síntomas y posibles confusiones. Es importante para lograr un diagnóstico precoz.
2.- También deben procurar limitar su contacto a los familiares más allegados. Sabemos que se trata de una etapa muy bonita que la mujer quiere compartir con sus seres queridos, pero la responsabilidad es esencial.
3.- Es muy importante asegurar un buen estado nutricional, pues una carencia vitamínica —por ejemplo, de vitamina D— puede hacer a la futura mamá vulnerable a las infecciones y, por tanto, más propensa a contagiarse por coronavirus.
4.- Es conveniente que vayan al hospital única y exclusivamente en caso necesario. En los últimos meses, se han incrementado y mejorado las consultas telefónicas, que pueden ahorrar muchos viajes y reducir los riesgos.
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