Redacción
repretel.com
Este lunes 24 de mayo, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, informó que más de 110.000 profesionales de la salud fallecieron a causa de la COVID-19 desde el inicio de la pandemia.
“Muchos se han contagiado ellos mismos y, aunque los informes son escasos, calculamos que al menos 115.000 trabajadores sanitarios y de cuidados han pagado el precio último al servicio de otros”, indicó Adhanom al inicio de la asamblea anual de la organización que preside.
El especialista reiteró su posición respecto a la “escandalosa desigualdad” en el acceso a las vacunas contra el nuevo coronavirus, debido a que el 75% del total de dosis en el mundo fueron administradas solo en 10 países.
“No hay forma diplomática de decirlo: un pequeño grupo de países que fabrican y compran la mayoría de las vacunas (…) controlan el destino del resto del mundo”, agregó.
Adhanom Ghebreyesus sostuvo que el número de fármacos elaborados “habría sido suficiente para cubrir a todos los trabajadores sanitarios y a los ancianos si se hubieran distribuido de forma equitativa”.
Finalmente, el jefe de la OMS instó a las naciones aliadas a promover la inmunización en su jurisdicción, así como a apoyar a otros países.
“Hoy pido a los Estados miembros un masivo impulso para vacunar al menos al 10% de la población de cada país de aquí a septiembre, y una campaña hasta diciembre para alcanzar nuestro objetivo de inmunización de al menos el 30% para finales de año”, añadió.