Una plaga de ratones nunca antes vista está azotando zonas rurales al oeste de Australia, lo que ha obligado a las autoridades a tomar medidas para controlar la situación.
Algunas comunidades rurales en el estado de Nueva Gales del Sur están sufriendo lo que es considerada la peor plaga de ratones en décadas, según han señalado algunos lugareños.
“Por la noche… el suelo se mueve con miles y miles de ratones corriendo”, dijo el agricultor Ron Mckay a la Australian Broadcasting Corporation.
En una noche se han atrapado hasta 600 roedores y por el momento hay tres personas hospitalizadas por mordeduras.
“Puedes imaginar que cada vez que abres un armario, cada vez que vas a tu despensa, hay ratones presentes”, dice el experto Steve Henry a Reuters.
La velocidad con que se reproducen los roedores tiene a las autoridades locales ante la mayor plaga en décadas. Solo un par de ratones puede producir en promedio hasta 500 crías en una temporada.
Diversos hoteles han tenido que cerrar sus puertas, porque los animales invaden las habitaciones. Algunos granjeros ya perdieron sus cosechas de la temporada a causa de la plaga sin control.
Los programas intensivos de cebo hasta ahora han tenido poco éxito contra la infestación, y los lugareños esperan que las fuertes lluvias ahoguen a los ratones en sus madrigueras.
Sin embargo, la principal preocupación de las autoridades australianas son las enfermedades que los ratones pueden transmitir a la población. La pandemia por el Covid-19, ha hecho que las infecciones transmitidas por animales a seres humanos sean monitoreadas con particular cuidado.
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