Es muy usual confundir el hambre con la ansiedad por comer, señala la doctora Maureen Vindas. Sin embargo, la especialista en nutrición, explica que son episodios totalmente distintos y con manifestaciones particulares.
Mientras que el hambre se manifiesta con dolor y ardor a la entrada del estómago, la ansiedad es el pensamiento repetitivo por querer ingerir algo, como los famosos antojos.