Una verdadera pesadilla enfrentaron los ticos, que en su intento de llegar a tiempo a su destino, optaron por madrugar sin imaginar que coincidirÃan con otros miles de ciudadanos que buscaban el mismo propósito. Esta situación desató un caos vial, principalmente en el anillo de Circunvalación y la avenida General Cañas, donde se pudo observar a cientos de vehÃculos intentando salir de la “trampa” en la que se encontraban.