El Barcelona viajó a Bilbao, donde este mismo jueves se medirá al Athletic Club en los octavos de final de la Copa del Rey, sin Memphis Depay, que padece una sobrecarga en los isquiotibiales del muslo izquierdo, y llamativamente sin Ousmane Dembélé, quien quedó afuera de la lista por decisión técnica.
Esta determinación de Xavi Hernández llegó después de conocer la postura del futbolista francés y su representante de rechazar cada una de las ofertas de renovación que les ofreció el club azulgrana durante los últimos meses y su deseo de abandonar el club el próximo mes de junio, cuando finalice su contrato.
Ante esta situación, Mateu Alemany (Director Deportivo) compareció ante los medios de comunicación del club para dar su versión de los hechos y defender la decisión de no convocar al futbolista galo.
“La realidad con Ousmane (Dembélé) es que hace seis meses desde que empezamos las negociaciones con su representante. Durante este tiempo hemos tenido una comunicación continua con ellos en relación con la voluntad del club de que continúe. Se le han hecho distintas ofertas, hemos estado muy encima de este tema, ha sido un tiempo más que suficiente para que el jugador haya decidido su futuro”, explicó el directivo.
Al entender que tanto su agente como el propio jugador ya habían tomado la decisión de abandonar la institución, Alemany sentenció: “Nosotros queremos a jugadores comprometidos con el futuro del Barça y, por lo tanto, él debería salir lo antes posible. Esta es la comunicación que le hemos hecho a él y, a partir de aquí, la decisión técnica del entrenador es coherente con la decisión del club y con esta secuencia de los hechos”.
En este sentido, Alemany puntualizó que el hecho de que no juegue en San Mamés “es la consecuencia lógica de una situación de negociación que ha acabado con la voluntad del jugador de no continuar” en el Barça.
Xavi también quiso dejar en claro por qué tomó la decisión de no convocar a uno de sus mejores jugadores (a lo que a calidad deportiva se refiere) en la rueda de prensa previa al duelo: “O Dembélé renueva o se le busca una salida. No se contempla que se quede en la grada. He sido muy claro con Ousmane. Hemos esperado mucho, llevamos cinco meses de conversaciones con él y lo que prima son los intereses del club”.
Estas declaraciones llegaron dos meses después de que el ex mediocampista culé asegurara en medio de su presentación como nuevo técnico del club que, “Dembélé, puede ser el mejor jugador del mundo en su posición. Pero hay que trabajar con él y exigirle”.
Hoy, el delantero parece mantenerse firme en su decisión de no aceptar las propuestas de renovación y marcharse con la carta de libertad bajo el brazo cuando llegue junio. Desde el Barcelona, en cambio, prefieren venderlo antes de finales de enero para lograr sacar un rédito económico por él.