Otilia Valdez y Juana Rosa Vizcarra estĆ”n cursando la primaria en una escuela de CĆ³rdoba, Argentina, para aprender a leer y escribir.
Su pasiĆ³n por la escuela las llevĆ³, con 83 y 79 aƱos respectivamente, a estudiar junto a docentes y estudiantes mĆ”s jĆ³venes que elllas.
Estas seƱoras, afirman que āles gusta la escuela” y que irĆ”n a estudiar “hasta que Dios las lleveā
Pero en este centro educativo no solo estudian, sino que ademƔs de aprender materias, comparten momentos importantes de sus vidas junto a sus compaƱeras y docentes.
El deseo de seguir aprendiendo el resto de la vida hace de esta historia un ejemplo de superaciĆ³n para muchos.
Para ellas, esta nueva oportunidad de aprendizaje va mƔs allƔ de lo que les estƔn acadƩmicamente enseƱando.