El aire está enrarecido, viciado, denso y contaminado, los neoyorquinos caminan a un ritmo más lento que de costumbre, preocupados por el efecto que esta situación, generada por favor canadienses, pueda tener en su salud.
El alcalde neoyorquino, Eric Adams, recomendó a la población evitar la actividad en el exterior a “las necesidades más absolutas”. “Esto no es el día para entrenar para un maratón”, afirmó.
La empresa IQAir.com, que vigila la calidad del aire alrededor del mundo, dijo que Nueva York registraba el peor nivel de contaminación de todas las ciudades del planeta.
Este evento es “otra señal preocupante de la manera en que la crisis climática afecta nuestras vidas”, declaró la vocera de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre