Estos enfrentamientos, que estallaron a mediados de abril en Sudán, han dejado ya más de 400 muertos y más de 3.500 heridos.
El país africano y su capital siguen inmersos en un enfrentamiento entre los dos máximos jefes militares.
Los fallecidos son, mayoritariamente, ancianos y menores de entre 1 y 14 años.
El organismo envió al condado de Fangak, ubicado al norte del país africano, a un grupo de científicos para estudiar la dolencia.
El pasado mes de noviembre en el norte de Etiopía estallaron los enfrentamientos bélicos entre el Gobierno central y las Fuerzas de Defensa de Tigray.
La interrupción afectará a 20 millones de ciudadanos, además de los jóvenes afectados a las evaluaciones