El aparato se convirtió en la primera nave espacial en atravesar una potente explosión solar cerca del Sol.
Este logro permitirá a los investigadores conocer mejor la evolución del astro rey y sus impactos en el sistema solar
La nave tomó las imágenes desde la órbita del planeta cuando estaba a unos 330-350 kilómetros de su superficie.
Las muestras recogidas fueron almacenadas herméticamente dentro del aparato para protegerlas de la influencia del entorno externo durante el regreso de la sonda a la Tierra.