“Asumí dónde estaría el corazón del elefante basándome en la experiencia humana. Cuando empezó a moverse, casi lloro”, sostuvo el paramédico, que ese día estaba de descanso.
La vida de Joaquín (nacido en Venezuela y llevado a Estados Unidos con solo tres años) fue cegada a los 17 años el 14 de febrero de 2018, cuando un tirador le abatió en Parkland.