La camarera contó que su jefe quería que le entregara el dinero para que él lo repartiera a todo el personal del restaurante, y como ella no quiso, la despidió.
El arquero español disfrutó de sus vacaciones en Quintana Roo, donde disfrutó de la gastronomía y dejó una curiosa propina en un restaurante.
"Volvía a ser el Juan Gabriel pobre", afirmó Silvia Urquidi, quien explicó que el fallecido artista era muy celoso con su dinero.