Venezolanos en muchas partes del mundo y también en nuestro país salieron a las calles a manifestarse por el fraude electoral de las pasadas elecciones.
En una demostración de unidad y determinación, miles de venezolanos se han manifestado en diversas ciudades del mundo para exigir el respeto a los resultados electorales y demandar la salida del presidente Nicolás Maduro del poder.
Las protestas, que han tenido lugar en ciudades como Madrid, Miami, Bogotá, Ciudad de México y ahora Costa Rica reflejan el descontento de la diáspora venezolana con la situación política en su país.
Los manifestantes, portando banderas de Venezuela y pancartas con mensajes de “Respeto a la democracia” y “Maduro vete ya”, hicieron un llamado a la comunidad internacional para que no reconozca los resultados de las elecciones que consideran fraudulentas y que perpetúan a Maduro en el poder.
Las denuncias de irregularidades en el proceso electoral y la falta de transparencia han generado un rechazo masivo tanto dentro como fuera de Venezuela.
Estas movilizaciones se enmarcan en un contexto de creciente presión internacional sobre el gobierno de Maduro, con varios países y organismos internacionales cuestionando la legitimidad de su mandato.
Los venezolanos en el extranjero, quienes han sido testigos del deterioro de las condiciones de vida en su país, ven en estas protestas una forma de visibilizar la lucha por la democracia y los derechos humanos en Venezuela.
Entre los manifestantes, se escuchan voces que claman por un cambio urgente en la dirección política del país.
“Queremos un futuro mejor para nuestras familias, para nuestros hijos, y eso solo será posible si hay un cambio real en Venezuela“, expresó uno de los asistentes a la marcha en Madrid.
Las protestas también han contado con el respaldo de organizaciones defensoras de los derechos humanos, que han denunciado la represión y las violaciones cometidas por el régimen de Maduro.
Los manifestantes insisten en que la presión internacional y la movilización ciudadana son esenciales para lograr una transición democrática en Venezuela.
Mientras tanto, el gobierno de Nicolás Maduro sigue desestimando estas exigencias, calificándolas como parte de una campaña de desestabilización orquestada desde el extranjero.
Sin embargo, la voz de la diáspora venezolana resuena con fuerza en distintas latitudes, enviando un claro mensaje de que la lucha por el respeto a la voluntad popular y la restauración de la democracia en Venezuela continúa sin descanso.