De 5.819 empresas que solicitaron suspender los contratos de sus trabajadores, de las cuales aprobaron 4.454 y, de estas últimas, 1.899 pidieron una prórroga. Al Ministerio del Trabajo llegaron denuncias de compañías que invitan a los trabajadores a renunciar tras la suspensión de contratos para evitar pagarles la cesantía.