Ante la crítica situación de emergencia nacional que enfrenta el país, el Gobierno de la República tomó la decisión de realizar un cierre de establecimientos con atención al público, a partir del lunes 3 al domingo 9 de mayo en los cantones de la Región Central.
“No podrán operar: Tiendas en general, tiendas por departamentos, los salones de belleza, barberías y estéticas, iglesias, gimnasios, entre otros” indica el comunicado.
Tras este anuncio la Conferencia Episcopal de Costa Rica, se pronunció y afirmó apoyar la medida: “Queremos apoyar todas esas iniciativas que buscan crear conciencia y tomar acción para afrontar el crítico momento que vivimos por la pandemia provocada por el COVID-19.” anotaron en el comunicado.
“Efectivamente conforme a lo que ha anunciado el Gobierno este día, entonces se cerrarían los templos de las diócesis de la Región Central del 3 al 9 de mayo”. indicó Monseñor José Manuel Garita Herrera Presidente de la Conferencia episcopal de Costa Rica y Obispo de Ciudad Quesada.
La Iglesia Católica hace un llamado a todos los costarricenses para que se cumpla todas la medidas interpuestas por las autoridades de Salud: “Es un llamado a los más jóvenes para que siendo empáticos con los más vulnerables se cuiden, porque solo así se cuidará al prójimo”