Christian Brueckner, principal sospechoso por la desaparición de Madeleine McCann, acusó a la policía alemana de alterar una fotografía.
Según él le alteraron su rostro y ponerle “dientes de conejo” para hacerlo parecer un atacante sexual.
La policía alemana sospecha de una serie de ataques sexuales de Brueckner en Portugal, país donde desapareció la niña británica en mayo de 2007.
Entre ellos, se encuentra un ataque a otra niña alemana de 10 años en una playa apenas un mes antes.
En una carta obtenida por Daily Mail, Brueckner acusa a los investigadores de manipular una imagen para darle dientes más prominentes.
“Descubrí tres pruebas que son manipuladas por la BKA (policía alemana). Sé que esto suena increíble. La forma en que manipularon la prueba es un trabajo tan poco profesional que me estoy riendo”, señaló
Y siguió:
“Ya es hora de que les diga que todavía no he perdido el sentido del humor, ni siquiera en esta situación crítica. Esto es lo que me mantiene vivo.
¿Ahora quieres saber qué manipularon? Te diré dos cosas.
La BKA sabía que la víctima le dijo a la policía en Portugal que el culpable tenía dientes ‘como un conejo’. O tal vez sabían que tenía algún problema con los dientes.
Así que me tomaron una foto y cambiaron mi apariencia haciendo que mis dientes fueran terriblemente feos. Incluso la víctima dijo al verlo que no puede recordar que eran tan terribles.
Eso es gracioso, ¿no? Pero no lo suficiente, la BKA tomó un archivo de un dentista al que fui en 1999, está bien, es un archivo de prisión.
Simplemente manipularon este archivo muy antiguo que tengo un tipo especial de hueso donde están los dientes (sic).
Dicen que el hueso de arriba está mucho más adelante que el de abajo. Definitivamente no soy yo, es falso.
Esto hace que sea bastante fácil para mí mostrar lo contrario”.
En la misiva a la que accedió el medio británico, luego subrayó: “Espero que este caso termine en los tribunales, pero no lo creo.
Estuve hablando con mi abogado por teléfono sobre eso y por alguna razón sé que la línea telefónica está controlada por la BKA, lo cual está prohibido.
Eso significa que saben por mis descubrimientos (sic) y también que perderán la cara frente a la corte y de muchos otros testigos”.
“Tengo curiosidad por los otros casos, pero hasta ahora mi abogado no los ha recibido. Eso significa que cualquiera puede decir cualquier cosa sobre mí, pero yo no puedo decir una palabra en mi defensa”, manifestó.