Recope la pidió cuentas a la municipalidad de Turrialba por un material, valorado en 32 millones de colones, que les donó para asfaltar una carretera. La constructora MECO retiró el producto y tras una inspección se confirmó que no se había aplicado. La compañía fue contratada por un costo de 521 millones de colones para una obra de tres meses.