El cuerpo humano cuenta con mecanismos naturales para controlar el crecimiento celular, reparar tejidos y eliminar células dañinas. Sin embargo, en algunos casos, estos procesos fallan, lo que permite que células anormales se multipliquen sin control y formen tumores.
El Dr. Luis Corrales indica que factores como la genética, la exposición a sustancias carcinógenas, infecciones virales, alimentación inadecuada y un sistema inmune debilitado pueden influir en esta pérdida de control. Con el tiempo, estos elementos comprometen los mecanismos que normalmente destruyen las células defectuosas, permitiendo que los tumores crezcan.