Un inesperado personaje hizo que se parara el partido entre el Alianza F.C de El Salvador y el Philadelphia Union de Estados Unidos en la Liga de Campeones de la Concacaf.
Se disputaba el minuto 68 de partido cuando un perro entró a la cancha y disputó el balón junto a los jugadores de ambos equipos.
El Alianza cobró un saque de banda a su favor, cuando el árbitro detuvo el partido por una invasión al campo de juego.
Un perro entró a la cancha y corrió, cual jugador en contragolpe, por el balón y comenzó a morderlo.
La mordida del can fue tal que el balón quedó totalmente inservible y tuvo que ser reemplazado.