La llegada de un policía holandés a nuestro país este miércoles coincidió con nuevos datos relacionados con el homicidio de una pareja de holandeses y del capataz de la finca.
Para el OIJ está claro que el móvil de los asesinatos fue el robo y por eso desde este miércoles revisan una a una las siete casas ubicadas dentro de la propiedad.
Seis de ellas eran para peones y una del capataz. Pero la casa principal es revisada minuciosamente.
Las presuntas muestras de que los asesinos realizaron algún culto satánico se consideran como un elemento distractor.
Más bien confirmarían la falta de artículos de valor por lo que el robo cobró fuerza.
Los restos de la pareja de holandeses serán enviados este fin de semana a su país.
La autopsia confirmó que la mujer y el capataz fueron ejecutados mientras que el finquero lo agredieron a machete.
El OIJ supo que semanas atrás hubo roces entre algunos empleados y los dos holandeses por lo que las sospechas de un exempleado molesto cobró fuerza.