Gerardo es un profesor de secundaria jubilado y ahora pasa sus días recordando los bellos momentos que vivió junto a su papá, Máximo Pérez, un agricultor oriundo de Naranjo.
Este profesor nunca se casó, pero aún recuerda un viejo amor, una jovencita de la que recibió su mayor tesoro en un viaje que emprendió a Estados Unidos cuando solo tenía 20 años. Lo único que tiene de ella es su nombre y un objeto al que llama la caja de música de Eylin.