A los 35 años, Gerard Piqué disputó su último partido como futbolista profesional: fue en la victoria del Barcelona por 2 a 0 ante el Almería, por la Liga de España.
Antes y después, el Camp Nou se emocionó con los últimos toques del zaguero que obtuvo 30 títulos en el Blaugrana y marcó una época.
Más allá de que en los últimos años lo sostuvo el nombre y se vio involucrado en muchos conflictos extradeportivos, como su escandalosa separación de la cantante Shakira.
No obstante, horas después de haber anunciado su despedida cuando todavía tenía contrato vigente con el elenco culé, el central organizó una “fiesta clandestina” para agasajar a todo el plantel del Barsa en un famoso local bailable de Cataluña.
La información la suministró el cronista y paparazzi Jordi Martin, quien además accedió a imágenes de la celebración y fueron publicadas en el programa de TV Socialité.
La fiesta se dio en un contexto incómodo para la plantilla: acaba de tropezar en el principal objetivo de la temporada, dado que no avanzó a los octavos de final de la Champions League (seguirá su camino en la competencia de segundo orden del continente, la Europa League).
No obstante, luego del triunfo frente al Viktoria Plzen se llevó a cabo el evento “cuando a las doce de la noche todos los jugadores deben estar en casa y se fueron a esta fiesta privada”, según la descripción del periodista.
“Piqué ha vuelto a las andadas y ha vuelto a salir de fiesta, de madrugada, por Barcelona”, prologó su informe el paparazzi, que además contó cómo logró el ahora ex futbolista para vaciar un local repleto de gente divirtiéndose para transformar la velada en una celebración exclusiva.