Redacción
Repretel.com
El misterio de la muerte masiva de elefantes en Botsuana parece haber sido resuelto. Después de más de tres meses de revisión de los 330 casos mejor documentados, los responsables del departamento de Vida Salvaje y Parques Nacionales del país africano han indicado que la muerte de paquidermos aparentemente sanos y sin señales de violencia está relacionada con un caso de contaminación.
Específicamente de la intoxicación del agua que bebieron estos animales en el medio natural con cianobacterias, bacterias potencialmente tóxicas conocidas antiguamente como algas verdeazules, porque los filamentos que forman tienen una apariencia similar a las algas, aunque en estricto rigor no lo son.
De hecho, los humanos pueden estar expuestos a las toxinas de las cianobacterias al beber o bañarse en agua contaminada y entre sus síntomas se incluyen irritación de la piel, calambres estomacales, vómitos, náuseas, diarrea, fiebre, dolor de garganta y dolor de cabeza.
Los altos niveles de ingestión de estas cianobacterias productoras de toxinas pueden provocar el envenenamiento y la muerte de hombres, animales, aves y peces.
Los científicos, además, advierten que el cambio climático juega aquí un papel importante, pues hace que estos incidentes, conocidos como florecimientos tóxicos, sean más probables, ya que se dan más en aguas calientes.
Muchos de los elefantes muertos fueron encontrados cerca de abrevaderos, pero hasta ahora las autoridades habían dudado de que las bacterias fueran las culpables, pues estas flores tóxicas aparecen en los bordes de los estanques y los elefantes tienden a beber del medio.
Pero luego de tres meses de pruebas en laboratorios especializados de Sudáfrica, Canadá, Zimbabwe y los Estados Unidos, han confirmado el origen de la muerte masiva de los elefantes, publica El Confidencial.
Los elefantes muertos en Botsuana por la causa ahora conocida sufrieron, en concreto, trastorno neurológico severo poco después beber agua contaminada por "una floración tóxica de cianobacterias en recipientes estacionales (fuentes de agua) en la región", dijo Cyril Taolo, director interino del Departamento de Vida silvestre y Parques Nacionales.
Una de las circunstancias más extrañas de este caso es que, aparentemente, los elefantes han sido los únicos grandes animales intoxicados. Ninguna otra especie silvestre se vio afectada por el agua tóxica en el área estudiada, cerca del famoso delta del Okavango en Botswana, reveló Taolo. Incluso los animales carroñeros, como hienas y buitres, que se observaron alimentándose de los cadáveres de elefantes no mostraban signos de enfermedad.
Foto: Shutterstock.