El médico que realizó una liposucción a Sara Gómez, fallecida el pasado 1 enero por no poder superar las consecuencias de 27 perforaciones en órganos vitales, habló tras su salida del juzgado en Cartagena, España.
El hombre declaró que lamenta “todo lo ocurrido” y que confía “plenamente en la justicia”.
Mientras tanto su abogado, Mariano Bo, defendió su competencia profesional afirmando que “es médico, y tiene el MIR”.
Asimismo, según detalló el diario La Verdad, indicaron que las circunstancias de la operación y sus secuelas «serán objeto de la declaración» del médico ante el órgano judicial correspondiente.
“Somos los principales interesados en que se haga justicia. Y eso incluye la presunción de inocencia que no se ha dado con este señor, al que se ha condenado ya públicamente y solo falta que le ejecuten”, indicó Pablo Martínez, uno de sus abogados.
Recalcó que su representado aceptó de buen grado la retirada del pasaporte “porque en ningún momento iba a fugarse y ha sido muy respetuoso con el procedimiento, dentro del profundo sentimiento de pena que tiene por lo ocurrido”.
Añadió que “no le ha sido suspendida su habilitación profesional y puede seguir ejerciendo”. “Es médico, con el MIR completado y acreditado, como lo demuestra que nadie le ha denunciado por intrusismo”, apuntó el letrado. “Otra cosa son las discusiones que tengan los colegios profesionales y los cirujanos plásticos y estéticos sobre la existencia o no de una especialidad determinada”, concluyó.
A Sara Gómez, de 39 años y madre de dos hijos, falleció tras la cirugía, en donde se le hicieron múltiples perforaciones en órganos como riñones, hígado, colon, intestino y duodeno, entre otro, llegándose a evisceración contenida.