Adoptar hábitos de consumo saludables es clave para mejorar el bienestar general y prevenir enfermedades a largo plazo.
Según el nutricionista Donald Vega, implementar una alimentación equilibrada basada en alimentos naturales y evitar productos ultraprocesados puede marcar una diferencia significativa en la salud.
Además, pequeños ajustes en la dieta diaria, como la hidratación adecuada y la planificación de comidas, pueden contribuir a un estilo de vida más saludable y sostenible.