Un decreto ejecutivo permitirá que los oficiales de la Fuerza Pública puedan utilizar armas automáticas, con el objetivo de equiparar la fuerza a grupos delictivos que en muchos casos usan armamento más moderno.
El Gobierno utilizó un reglamento de excepción para que los oficiales de la Fuerza Pública puedan utilizar el armamento automático sin cambiar la Ley Sobre el Uso de Armas de Fuego. El cambio ya entró a regir.