En 2014 una costurera tuvo problemas para asegurarse. Ella aparecía, según la oficina de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en una sociedad anónima como asesora, esta estaba a nombre de Ofelia Taitelbaum, en ese momento defensora de los habitantes.
Habría recibido unos ¢32 millones como asesora, pero asegura que nunca llegaron a sus manos.
Ahí se da cuenta la Fiscalía, que, mediante el uso de documento falsos, y ya con una condena en firme del año 2019, se utilizó a la costurera para evadir impuestos.
El pasado 9 de enero la parte acusada con el Fiscal de Probidad, Ronald Segura, y el procurador Miguel Cortés habían llegado acuerdo para establecer la pena en 72 años.
Sin embargo, por el Sistema Judicial de nuestro país, la pena se reduciría a siete años y medio.
Pues esta información se confirmó hoy jueves. La pena quedó adecuada a siete años y seis meses, según el Tribunal Penal de Heredia, por el delito de uso de documentos falsos.