En promedio, cinco conductores por día fueron sancionados con una multa de ¢221.458,59 y acumularon 4 puntos en la licencia el año pasado, por llevar niños de menos de 12 años y de 145 cm de talla en un carro, sin el dispositivo de retención adecuado.
La cifra total de 1.901 casos es, a criterio de German Marín Sandí, director de la Policía de Tránsito, una de las conductas más deplorables de los conductores, es decir, de las mamás, los papás, los tíos o los abuelos, ya que el menor confía en esa figura familiar y se espera de esa persona adulta un comportamiento responsable, donde siempre la prioridad sea la seguridad de ese menor indefenso.
“Es frustrante detener en carretera a los vehículos y ver mamás o papás con un bebé o niños de pocos años en sus regazos, en el asiento delantero, como si esos brazos que sostienen al menor sirvieran de algo en un accidente. Por instinto, la persona siempre buscará protegerse con los brazos y soltará al menor, y en un choque frontal, ese menor, y me disculpan que sea tan gráfico, saldrá volando por el parabrisas, tras romperlo con su cuerpo o cabeza” explicó el funcionario.
Con la misma multa, durante el año pasado, 154 personas fueron sorprendidas por las autoridades policiales transportando niños de menor de 5 años en una motocicleta, pese a que es ilegal, por lo vulnerable que es este menor para sujetarse adecuadamente.
