El papa emérito Benedicto XVI podría ser acusado por encubrir un caso de pedofilia en Alemania

El papa emérito Benedicto XVI está en el punto de mira. Un informe sobre el abuso sexual de menores en la Iglesia católica en Baviera debería aclarar si el papa emérito Benedicto XVI y otros clérigos de alto rango encubrieron en algún momento a un sacerdote pedófilo.
Un bufete de abogados fue el encargado de investigar sobre una arquidiócesis alemana. El trabajo incluye un análisis sobre el mandato del entonces Cardenal Joseph Ratzinger. Para verificar los hechos, hay un testimon del Papa emérito. Este ocupa unas 82 páginas y da respuestas a los letrados.

El informe le atribuye al papa emérito no haber actuado al menos en cuatro casos conocidos ocurridos bajo su jerarquía. No obstante, destaca que él ha negado “contundentemente” estas acusaciones. Sin embargo, los responsables del informe consideran “poco creíbles” la reacción del religioso. Él estaba a cargo de la arquidiócesis en el momento en que se cometieron los abusos.
En dos de los casos investigados, los crímenes fueron presuntamente cometidos por dos clérigos que prestaban asistencia espiritual. No se actuó en contra de ellos. Los abogados sostienen que por parte del expapa no hubo “ningún interés reconocible” en actuar frente a ellos.
“Él da la bienvenida al procesamiento en Munich y la publicación del informe”, explicó su secretario privado, el arzobispo George Gänswein. Además, añadió que el destino de las víctimas de abuso “fue muy sentido para él”.
Información del caso
Según la historia, en 1980 el vicario de Renania del Norte-Westfalia, Peter Hullermann, fue acusado de abusos sexuales a menores. Al enterarse, sus superiores lo transfirieron a Baviera, donde repitió sus delitos.
En 1986 un tribunal lo condenó a prisión condicional. Entonces, la Iglesia católica germana volvió a trasladarlo a otra ciudad bávara. Allí ofició como sacerdote durante unos 20 años y, según las denuncias, reincidió.
Finalmente, en 2010, bajo el pontificado de Benedicto XVI, el cura pedófilo finalmente se vio obligado a jubilarse. Ese mismo año estallaron las primeras grandes revelaciones de pedofilia en la Iglesia católica de Alemania.
El vicario general Gerhard Gruber asumió la responsabilidad y dijo en 2010 que Joseph Ratzinger, ya papa, no tenía conocimiento del pasado de Hullermann.