El potente sismo de 7,8 grados de magnitud que sacudió a Ecuador el sábado a la noche dejó al menos 238 muertos, según datos oficiales divulgados por la Secretaría de Gestión de Riesgos.
El presidente Rafael Correa, quien se encontraba el El Vaticano en el momento de la catástrofe, anunció que aterrizará directamente en Manta, cerca del epicentro del sismo, a las 18.30, hora local.
El mandatario informó a través de Twitter el envío a la zona afectada de dos hospitales móviles y la preparación de albergues para alojar a los damnificados.