Tras una caminata rodeada de frondosa vegetación y el trino de aves silvestres, se puede llegar al cañón de Tierra Grande, ubicado en las faldas del Volcán Turrialba. Las hermosas formaciones rocosas, resultado del paso de la lava, se convierte en el primer reto a superar, para luego descender y llegar a la base de una hermosa catarata. Una aventura de belleza extrema en uno de los espacios que mejor retrata la belleza de la geografía de nuestro país.