Siete jóvenes afroamericanos han sido indultados tras 70 años de su muerte en la silla eléctrica después de ser acusados de una supuesta violación grupal a una mujer blanca en el estado de Virginia (Estados Unidos).
El último martes, el gobernador Ralph Northam concedió el indulto póstumo al grupo conocido como ‘Los siete de Martinsville’.
“Aunque estos indultos no abordan la culpabilidad de los siete, sirven como reconocimiento de la Commonwealth de que estos hombres fueron juzgados sin el debido proceso adecuado y recibieron una sentencia de muerte con sesgo racial que no se aplicó de manera similar a los acusados blancos”, comunicó la oficina de Northam.
Se menciona que la sentencia tuvo sesgo racial, ya que ‘Los siete de Martinsville’ fueron declarados culpables de violar a Ruby Stroud Floyd (32) —una mujer blanca que había acudido a Martinsville, un barrio predominantemente negro— por un jurado conformado en su totalidad por personas blancas.
Según los familiares de los sujetos, sus parientes fueron interrogados sin la presencia de un abogado y bajo presión. Además, fueron coaccionados bajo amenazas de ser agredidos si no confesaban.
“Todos merecemos un sistema de justicia penal que sea justo, equitativo y que cumpla su papel, sin importar quién eres o cómo te ves. Estoy agradecido a los defensores y a las familias de ‘Los siete de Martinsville’ por su dedicación y perseverancia”, añadió.
Cuatro de los hombres fueron ejecutados en la silla eléctrica de Virginia el 2 de febrero de 1951. Tres días después, los sujetos restantes sufrieron el mismo final, ya que en aquella década la violación era un crimen castigado con la pena máxima (pena de muerte).
Northam se reunió con los familiares para firmar los indultos correspondientes, tras un año de constante presión por parte de la Coalición Martinsville 7, conformado por miembros de sus familias y defensores de la comunidad, según WWBT.
“Aunque no podemos cambiar el pasado, espero que la acción de hoy les traiga una pequeña medida de paz”, concluyó Northam.