Según la especie, las orquídeas necesitarán áreas con mucha iluminación, pero no sol directo. Este cuidado también debe considerarse en los espacios con poco flujo de aire, pues los lugares cerrados pueden dañar a esta flor. La experta en el cultivo de esta planta, Rebeca Zamora, recomienda también cuidad el riego y la fertilización, pues el exceso de cuidado puede producir efectos negativos.