Las primeras protestas contra Donald Trump han comenzado en Estados Unidos, con manifestantes que rechazan los recortes presupuestarios, las políticas migratorias y la influencia de Elon Musk en su gobierno.
Estos factores han generado un creciente malestar, especialmente entre grupos sociales afectados por las decisiones del exmandatario.
La presión aumenta a medida que las manifestaciones se multiplican, exigiendo cambios en la administración y sus políticas.