El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Randall Zúñiga, envió un contundente mensaje a los grupos criminales que buscan atemorizar a las autoridades en Costa Rica.
En respuesta a los recientes atentados contra la Fuerza Pública en Guácimo de Limón, Puntarenas y Batán de Matina, Zúñiga aseguró que la reacción será rápida y decisiva.
“Necesitamos, a nivel país, una respuesta directa e inmediata a estas situaciones, y el OIJ se encargará de generarla”, afirmó.
Según Zúñiga, las bandas criminales están utilizando armamento pesado, como fusiles de asalto y bombas de fabricación casera, para amedrentar a las autoridades.
“No podemos permitir que el crimen organizado aproveche el caos. Costa Rica no se puede ir de las manos”, añadió.
El director del OIJ destacó los esfuerzos del organismo para desmantelar estructuras criminales de manera sistemática, aunque reconoció que la delincuencia está alcanzando niveles alarmantes.
“Situaciones como esta buscan amedrentarnos, pero no lo lograrán. Vamos a salir avante de esto”, aseguró.
Zúñiga hizo hincapié en que el enfrentamiento a la delincuencia no puede hacerse de forma aislada. Es necesario un esfuerzo concertado de todas las instancias del país para revertir la tendencia de amedrentamiento hacia los cuerpos policiales.
En el caso de Batán, las autoridades lograron recuperar las armas utilizadas en los atentados contra una patrulla y detuvieron a dos sospechosos, de 20 y 22 años, quienes están ahora bajo investigación.